EL LOBO Y EL PERRO GUARDIÁN
El lobo estaba tan flaco que las costillas se le marcaban en la piel, se encontró con un perro bien alimentado y el lobo le preguntó como lo hacía para estar así y este le dijo que su amo y sus criados le daban las sobras.
Fueron a buscar una casa para que acogieran al lobo, pero se dio cuenta que el perro tenía una herida en el cuello y el perro le dijo que era de la cadena que le tenía su dueño puesta por la noche. Y el lobo decidió no seguir buscando casa para él.
‘’Es mejor pasar hambre siendo libre
que comer a diario siendo esclavo’’